La Navidad en la Costa Blanca Norte tiene un sabor único, y la comarca de la Marina Alta se viste de gala para ofrecer una emocionante alternativa mediterránea a los mercados más tradicionales. Lejos de la nieve, el sol y la brisa marina son el telón de fondo perfecto para que pueblos como Teulada-Moraira y El Poble Nou de Benitatxell desplieguen su encanto festivo, centrándose especialmente en la ilusión de los más pequeños.
Si estás buscando una experiencia familiar inolvidable en la provincia, los mercados navideños en Alicante y su área de influencia en la Marina Alta son una parada obligatoria.
Cascos Históricos Engalanados: El Escenario Perfecto
La magia comienza en las calles. Tanto el Mercado de Navidad de Teulada (que a menudo se celebra en la Plaza de la Constitución) como el de Benitatxell transforman sus centros históricos en pequeños universos de ilusión. Las fachadas de piedra y las calles adoquinadas se adornan con luces, guirnaldas y motivos festivos, creando una atmósfera de cuento que invita a pasear.
Aquí no solo se trata de comprar, sino de vivir una jornada festiva. Los padres pueden disfrutar de la gastronomía y la artesanía local mientras los niños están inmersos en actividades diseñadas especialmente para ellos.
Diversión Garantizada: Talleres y Entretenimiento Infantil
El corazón de estos mercados es la intensa programación infantil. Los organizadores saben que la Navidad es sinónimo de juego, por lo que la oferta incluye:
- Talleres Creativos: Los pequeños se convierten en artesanos por un día, participando en la elaboración de adornos navideños, pintando caretas o creando sencillas figuras de arcilla. Estas actividades no solo los entretienen, sino que les permiten llevar a casa un recuerdo hecho por ellos mismos.
- Cuentacuentos y Teatro de Calle: En un ambiente íntimo y cercano, narradores locales dan vida a historias navideñas tradicionales y modernas. El teatro de calle y las animaciones con personajes fomentan la fantasía y la participación.
- Aparición Estelar de Personajes: El momento cumbre de la jornada suele ser la visita de Papá Noel, o a finales de diciembre, de los Emisarios Reales. Los niños hacen cola con sus cartas en mano, entregando personalmente sus deseos y llevándose una foto de recuerdo. En Benitatxell, por ejemplo, la zona de juegos y las actividades lúdicas suelen ocupar un espacio importante, a menudo incluyendo atracciones como un tiovivo ecológico o castillos hinchables.
Solidaridad y Comunidad: El Alma de la Feria
Además del componente lúdico, estos mercados resaltan el espíritu comunitario. Es habitual que diversas asociaciones locales y ONG monten sus propios puestos.
- Puestos Solidarios: Aquí se pueden encontrar manualidades, repostería casera o productos de segunda mano, con el objetivo de recaudar fondos para causas benéficas. Comprar en estos stands no solo significa llevarse un regalo original, sino también contribuir directamente al bienestar de la comunidad.
- Comercio de Proximidad: La participación de los comercios locales garantiza una oferta de regalos y productos “kilómetro cero”, desde dulces tradicionales hasta artesanía de la Marina Alta, asegurando que el gasto se queda en la economía local.
Visitar los mercados de Teulada-Moraira y El Poble Nou de Benitatxell no es solo una excursión de compras, sino una inmersión en una Navidad familiar, soleada y genuinamente mediterránea. Son el testimonio de cómo la tradición se adapta al encanto de la Costa Blanca.